El malagueño, que ha llegado a liderar la prueba en solitario se ha dado una oportunidad de victoria tras una jornada magnífica de juego, resultado y sensaciones. Tyrrel Hatton que ha jugado con él, se ha sorprendido gratamente con su juego y nos lo ha contado.
Por unos minutos (bastantes) Ángel Ayora (-12) ha liderado la final del DP World Tour y, como se podrán imaginar, nos hemos comido todas las uñas de las manos. Muy complicado hacer esto de manera más emocionante, la verdad. Sesenta y siete golpes y han podido ser bastantes menos.
Hoy ha jugado al golf de verdadero lujo. Lo sabemos porque le hemos seguido por el campo y lo ha bordado. De verdad, es difícil hacerlo mejor. Si llega a tener un pelín más de fortuna con algunos putts, estaríamos hablando de un resultado de verdadero bochorno para el resto del field.
Segundo día seguido con cinco golpes bajo par y tercera ronda seguida por debajo del par. Pinta muy bien. Además, durante la vuelta de hoy hemos visto como algunos de los pares, sobre todo al principio de la vuelta, bien podrían haber sido birdies. Si la bola rueda una vuelta más en algunos hoyos, el resultado hubiera sido mucho mejor.
En el uno, su putt para birdie se queda a escasos tres centímetros del hoyo. En el tercero, le faltaron treinta centímetros para ser birdie. En el cuarto fueron diez los centímetros que le faltaron y, en el cinco, quince centímetros. En el ocho, veintidós centímetros. Una cosa tremenda. Con un poquitín más de fortuna, Ángel, hoy habría reventado el campo.
Si tienen un rato y les pica la curiosidad, miren shot tracker que el DP World Tour pone a disposición en su web, dentro del resultado de cada jugador y verán lo que les decimos.
De hecho, si el guión lo hubiésemos escrito nosotros, únicamente habríamos cambiado como se desarrolló el juego de Ángel en el hoyo dieciocho del Earth Course de Jumeirah Golf Estates. Tras una mala salida, ha tenido que dropar con penalidad. Su segundo golpe es un momento de fortuna en el que, gracias a un buen bote, la bola no se va al riachuelo que divide la calle del hoyo en dos.
La poca distancia con la bandera le ha forzado a hacer un approach algo más largo de lo deseado que se ha ido al fondo del green, a unos 24 metros de bandera. El birdie era poco menos que una quimera y el tripateo le ha terminado por matar. Bogey.
Hay que decir que, como verán en el vídeo de la entrevista que le hemos hecho al finalizar su vuelta, Ángel ha dicho que no le ha afectado para nada, pero en el hoyo diecisiete han tenido que esperar bastantes minutos en el tee a que la partida anterior finalizase. Sinceramente, ha sido excesivo.
Este tropiezo del dieciocho, unido al buen día de Rory y de Neergaard-Petersen, ambos con 68 golpes en su tarjeta de hoy, han privado a nuestro joven talento de dormir en el liderato. La verdad, casi mejor para que mañana pueda jugar con algo más de tranquilidad y sin tener que padecer el circo que se suele montar en estas tierras cuando Rory McIlroy juega para ganar en un domingo. De todo menos cómodo.
Lo cierto es que Ángel sí quería ese follón y vivir esa experiencia. Sobre todo la de jugar con Rory Mcilroy en una última vuelta y con opciones de pelearle la victoria. Tendrá que esperar para verse en esa tesitura. Por lo pronto, jugará otra vez con Tyrrell Hatton y saldrán ambos a un golpe de los líderes. Hay que jugarlo.
Ángel estaba exultante al terminar su vuelta, como es normal, y nos decía que ya se había imaginado durante la vuelta de hoy en el green del dieciocho, mañana, alzando el trofeo y recibiendo el reconocimiento del público y de muchos de sus ídolos que están presentes en el field del torneo.
Hoy, además, le ha hecho su primer eagle al Earth Course de Jumeirah Golf Estates. Ha sido en el hoyo catorce. Nos lo cuenta en la entrevista que le hemos hecho. El primero siempre es más especial. Este, además, le sirvió para dos cosas muy importantes. La primera, recuperarse del bogey que hizo en el once. La segunda, empatar en el liderato del torneo con Rasmus Hojgaard y Laurie Canter.
Por cierto, hay más buenas noticias a punto de convertirse en realidad para Ángel Ayora. Está a dieciocho hoyos de alcanzarlas. La primera es que, con este resultado proyecta puesto dieciocho. Esto significa dos cosas: acceso a una de las tarjetas que permiten disputar el PGA y, además, jugar el The Open Championship en 2026. Sería el broche perfecto pero, como les decíamos, aún quedan dieciocho hoyos y Ángel está en posición de aspirar a lo máximo en Dubai. Ganar es posible. ¡Claro que sí!.
Hemos hablado con Tyrrel Hatton sobre Ángel Ayora. El malagueño está dejando muy buenas sensaciones en tíos que tienen mucha experiencia en este “negocio”. Está causando un impacto positivo en fulanos que tienen “el culo pelado” de ver jugadores prometedores. Dudamos mucho que hablen así de muchos. Si, ayer, Patrick Reed reconocía que había alucinado con Ángel, hoy ha sido el compañero de Jon Rahm en Legion XIII quien nos ha dado muy buenos comentarios de Ángel.
Tyrrell, muchas gracias por tu tiempo. ¿Qué sensaciones has tenido al jugar con Ángela Ayora, que es uno de nuestros jugadores con más proyección en España?
Sí, justo se lo he dicho al salir del green del 18: ha sido muy impresionante.
Ha hecho una vuelta muy buena y ha tenido un pelín de mala suerte en el 18, pero vamos, que le pega increíble.
¿Qué aspectos de su juego destacarías más?
Pues creo que hoy ha estado muy fino desde el tee y, además, le pega larguísimo.
Si estás en calle y encima tan adelante, es una ventaja enorme.
Ni tan mal, ¿no? Ángel tiene que estar muy orgulloso de lo que está haciendo y de las impresiones que está dejando en los pesos pesados del Tour. Mañana, repetirán partida Tyrrell Hatton y Ayora.
Cuando nos marchábamos del campo, hemos podido ver como Ángel Ayora se quedaba en la cancha de prácticas trabajando con Juan Ochoa. Lo que les decimos nosotros y Patrick Reed. Un tío con una cabeza muy bien amueblada y una ética de trabajo que, por fuerza le va a llevar lejos.
Además de Ayora, hay tres españoles más disputando el torneo en Dubai. La verdad es que ninguno ha tenido su día. Todos han terminado el día por encima del par.
Campillo (-1) y Chacarra (-1) han hecho setenta y tres golpes en el día para terminar la jornada en el puesto cuarenta y cuatro empatados y mañana jugarán juntos la última ronda en Dubai. Será bonito verles jugar juntos y ver de qué son capaces en una última jornada sin demasiado aliciente para ellos. Necesitan dos vueltones para poder mirar a alguna de las posiciones que dan acceso al The Open.
Nacho Elvira (+6), por su lado, ha vuelto a encadenar un resultado decepcionante. No está siendo fácil la semana para el cántabro que debe darse mañana un respiro con su juego y marcharse con mejores sensaciones. De momento, es el farolillo rojo de la prueba.
