Mandan el francés Ugo Coussaud y el británico Bairstow (-6). Les siguen de cerca un grupo de tres perseguidores: Penge, Lacroix y Wiesberger (-5). El mejor de los nuestros Ángel Ayora (-4).
Día complicado, sobre todo por la mañana, en el Club de Campo de la Villa de Madrid. Mucho viento racheado y cambiante que ha dificultado o, mejor dicho, estropeado buenos golpes bien ejecutados cuyo resultado ha sido pobre.
Así nos lo decía Jon Rahm (+1) que, tras su vuelta, comparecía ante los medios para reflejar su frustración con el viento: “mi pelea ha sido hoy con el viento. No tengo la sensación de haber jugado mal. El swing lo he sentido muy bien” y añadía que “ha sido un día frustrante en ese sentido”.
El León de Barrika compartía partida con otra de las figuras estelares y uno de los jugadores que más afecto a recibido del público presente en el campo. Hablamos de Shane Lowry (+4) que ha tenido un día regulero en la oficina. Destacaba Jon que, en un momento le ha dicho a Shane para animarle que “no te preocupes que has metido un putt (en la Ryder) que pocos en su vida van a poder decir que han metido y es un momento histórico del golf”.
Por su parte, el tercer componente de la partida estelar y vigente campeón del Open de España, Don Ángel Hidalgo (-1) destacaba ante los medios que el irlandés “es un tío de 10”. “Jugar con Shane ha sido una maravilla. Independientemente de cómo fuese siempre tenía un comentario gracioso o alguna anéctodota”. El malagueño ha disfrutado la ronda de hoy.
Al respecto del viento, Ángel señalaba que “hemos pegado golpes buenos que salían mal” pero se mostraba contento con su juego porque “he estado pegándole mal estos días de entrenamiento, pero hoy, mucho mejor”.
Como Ustedes se podrán imaginar, el día de hoy ha sido muy especial para Ángel. Volver a este campo en competición oficial tras su hazaña del año pasado ha tenido que ser muy emotivo. De hecho, le han preguntado por esto y decía que “ver la grada con gente al subir hacia el 18 me ha removido por dentro”.
Preguntado por el cariño del público hacia él, ha sacado a relucir su arte para el humor y destacaba que “me alegrado ver tantos niños un jueves aunque no sé cómo los padres les dejan. Pero se lo podemos pasar hoy y mañana”.
Terminaba su comparecencia destacando lo feliz que le hace jugar este torneo “es un gustazo estar aquí porque es el mejor torneo del año”.
Además, hay que destacar que Ángel ha sido el mejor de su partida. El campeón defensor del título ha ganado el primer asalto. Mañana, el segundo con los dos colosos campeones de la Ryder Cup.
En el turno de la tarde hemos tenido ocasión de escuchar declaraciones de David Puig (-2). Al respecto del viento nos decía que “durante los primeros diez u once hoyos había vientecito. En los últimos seis o siete ha bajado un poco. Con tanto árbol es difícil predecir de dónde viene”.
Nos indicaba que “el campo ha jugado difícil hoy. Las posiciones de bandera y el vientecito que ha hecho lo han complicado”. Al respecto de su juego, tiene claro que “le he pegado muy bien desde el tee. He ido muy largo y muy recto” y reconocía que “con el putt no ha sido mi mejor día”.
Le preguntamos por el birdie al que daba más valor de los cinco conseguidos hoy y, David, lo tiene claro: “el birdie del once puede parecer un gran birdie pero el del catorce, por dentro, me ha ayudado bastante”. Tanto fue así que David sacó el puño tras embocar el putt.
David tiene marcada en rojo esta semana en su calendario y así nos lo confesaba hace unos meses en Valderrama, durante la prueba de LIV Golf Andalucía. Sobre todo porque el año pasado se dio una oportunidad de victoria. De hecho, jugó en el partido estelar el útimo día con Jon y Ángel. Dejó claro que “tengo olvidado lo del año pasado e intento aprender de los errores que cometí” pero advierte “he venido a ganar el torneo”. David es consciente de que el Open de España puede ser la llave al Masters y al The Open Championship. “Me gustaría estar en Augusta” el año que viene.
El último de los nuestros al que pudimos hacer algunas preguntas fue Rafa Cabrera Bello (-2). Nos encontramos a un jugador distinto. Mejor. Claramente, Rafa ha encontrado lo que estaba buscando en si swing. “Desde principio de año, con los nuevos profesores me encuentro más cómodo. Dieron con la clave, o me lo explicaron de la manera en la que yo necesitaba escucharlo. Está funcionando. Le estoy pegando a la bola muchísimo mejor”.
No en vano, este año ha hecho tercer puesto en el Amgen Irish Open y, hoy, vuelve a terminar bajo par. La sentencia lo dice todo “vuelvo a confiar en mi swing”.
Preguntado por el birdie al que más importancia ha dado de los cinco de su ronda, Rafa explicaba que “el birdie del catorce ha sido importante porque venía del bogey del trece” y añadía que “ha sido ese birdie que ha transformado una vuelta que se había frenado”
Mañana, más Open de España. Más golf de primer nivel en el Club de Campo. No falten que será una pasada.